¿ Y tú te lo crees?

   Muy a menudo y casi sin darnos cuenta abrimos la boca y comemos mierda. Ahora mismo estarás pensando: "Eso lo harás tú, no yo". Pero por desgracia te equivocas, en mayor o menor medida todos comemos mierda, o ¿A caso tu nunca as intentado destapar la felicidad de una simple lata de refresco?¿ O no as intentado reactivar tu cuerpo con un yogur que luego resultar ser igual a los demás?¿ No te compraste unos calzoncillos para enseñar o unas gafas que simulan la apariencia de una mosca? Por mínimo que sea, siempre hay algo, algo que as hecho por pura inducción, algo que no ha salido de ti, pero sin saber porque, lo has hecho. Hay gente que se da cuenta pronto de que no por tomar una determinada marca de leche, consigues salir cantando la versión italiana de "Felicidad" del baño, ni de que por preparar una sopa "especial" tu crío de dos meses te a ha bailar un cabaret.
   Pero hay gente que no, que no se da cuenta de que están comiendo basura, de que están siendo manipulados por el consumismo y así, sin darse cuenta, pasan su vida en la peluquería, imitando el "look" de cualquier futbolista  que esté a la orden del día, de cualquier Don nadie ignorante y popular por su estupidez y pasan el día en tiendas que más que de moda parecen de uniforme y pierden las ganas de todo, las ganas de aprender, de crecer por dentro, de evolucionar. Alcanzan tal grado de aparente felicidad que olvidan todos lo demás, y así pierden su vida, intentando ser el más popular, el más actual, la más chula o ingeniosa. Es triste pero cierto y si tú eres un comedor de caca te daré una pista: La felicidad no se encuentra en un refresco que es repartido por la mayor flota terrestre del mundo, ni tendrás más estilo por beber un cappuccino de otra marca, no te lo montarás con 20 tías por día por usar un desodorante, ni si quiera te mirarán, no viajarás al mundo de yupi  por usar determinadas compresas y no serás más tonto por no comprar electrodomésticos y aparatos de tecnología avanzada en un determinado lugar.
   En fin, solo puedo decirte lo siguiente; Apaga la tele, sal con tus amigos y amigas, sonríe, guiña un ojo a alguien, comete errores y locuras pero por favor no hagas lo que otros te digan que hagas para ser esto o para ser lo otro.
   " Es difícil mantener los ojos abiertos contra el viento, muy difícil, pero no imposible".